Lo puedes realizar con tarjeta de crédito, transferencia o ingreso en efectivo en una oficina bancaria. Es imprescindible que en el resguardo del banco aparezca en el ordenante el nombre del alumno independientemente de quien realice el ingreso y del curso. El nº de cuenta BANCO ABANCA: ES51-2080-1208-22-3040041932. Hasta que no tengamos constancia del pago del curso no procederemos a darte de alta.
Estar en posesión del título de diplomado, licenciado o grado, o en proceso de obtención de los mismos.
Para comprobar si puedes realizar más de un curso a distancia a la vez te recomendamos que te pongas en contacto con la sede de CSIF más próxima y ellos te asesorarán sobre la posibilidad de realizarlos, hay comunidades autónomas que los permiten.
Es importante que al matricularte compruebes que tus datos personales (nombre, apellidos y D.N.I) estén correctos. El coste de duplicados por error en los datos consignados o por extravío correrán a cargo del alumno. Para solicitar dichos duplicados se hará a través de tu sede de CSIF Provincial.
Los documentos están accesibles solo a través de la plataforma durante el tiempo que dura el curso. Una vez finalizada la convocatoria no podrás tener acceso al curso.
Para la obtención del certificado correspondiente, es imprescindible realizar y superar test y actividades finales de evaluación, antes de la fecha de finalización. Los certificados están disponibles en un plazo aproximado de un mes desde que finaliza la convocatoria del curso. Recibirás un correo electrónico, al email que dio de contacto cuando se matriculó, con las indicaciones para la obtención del certificado digital. Solo se manda en formato digital. No obstante, podría hacerse un provisional solicitándolo al email educacion.formacion@csif.es, siempre que se cumplan los requisitos y conste como apto una vez finalizada la convocatoria en la que esté matriculado.
Educar es sin duda, una de las labores más importantes y exigentes en la sociedad; el objetivo principal es preparar a los niños y jóvenes para la vida.
Dentro del universo de la educación, la disciplina es un aspecto medular. De manera general, esta constituye la forma cómo los adultos guían y acompañan a las y los estudiantes en su proceso de desarrollo cognitivo y socioafectivo. De manera más precisa, es aquella que educa para la vida en un mundo cambiante y que requiere docentes que acompañen de manera respetuosa, sensible, empática y alentadora a los estudiantes en el desarrollo de sus habilidades cognitivas y socioemocionales, y en el logro de sus aprendizajes.
El acceso a las nuevas tecnologías y el acelerado ritmo de vida actual generan un entorno emocional y social complejo, y cada vez más, docentes, familias y personal no docente se encuentran sin recursos para motivar a los alumnos en el desarrollo de habilidades y capacidades y orientarlos hacia una convivencia pacífica.
La Disciplina Positiva ofrece recursos y estrategias para ayudar a los alumnos a expresar sus pensamientos y emociones de forma respetuosa, aceptar la diferencia como algo enriquecedor, desarrollar autorregulación emocional, responsabilidad, cooperación, empatía, resolución de problemas, etc. y así aprovechar al máximo el tiempo en clase para generar aprendizaje.
Un alumno que es escuchado, querido y tenido en cuenta, aprenderá a escuchar, querer y tener en cuenta a los demás.
La Disciplina Positiva ofrece a los docentes recursos y herramientas en forma de proceso integral de desarrollo humano, trabajando tanto la relación con uno mismo (gestión de pensamientos, sentimientos y necesidades) como la comunicación y relación entre docentes y alumnos, para mejorar la convivencia en el aula.
Utilizar estas metodologías en el aula reduce el número de conflictos, aporta recursos para que docentes y niños/adolescentes puedan resolver de forma respetuosa las dificultades de convivencia que puedan surgir y potencia el desarrollo de “habilidades para la vida” como son responsabilidad, autonomía, cooperación, empatía, autodisciplina, comunicación respetuosa, autocontrol emocional y enfoque en soluciones.
La fuerza motriz del trabajo educativo en la Educación de nuestro alumnado, es una mirada abierta a las posibilidades de cada alumno, portadores de potencialidades por desarrollar y por estimular. Estas potencialidades devendrán en desarrollo de capacidades en función de la estimulación recibida. Ésta es nuestra tarea, compromiso y responsabilidad.
La disciplina positiva te ayudará a crear un ambiente cooperativo y de respeto mutuo mediante principios y estrategias respetuosas. Te ayudará también a fomentar el crecimiento socioemocional, base de la autoestima y del aprendizaje académico.
La relación con los demás es esencial para que el individuo sobreviva y por ello, forjar una inteligencia emocional y una disciplina positiva, pasa por adquirir habilidades sociales. Así, debemos ser capaces de entender qué conmueve, perturba o alegra a quienes tenemos al lado.
Adquirir estas habilidades sociales es algo que hay que hacer cuanto antes y para ello es necesario que la gestión emocional y la disciplina positiva se introduzca en la educación desde la más tierna infancia
Maestros y Profesores funcionarios, interinos o en situación de paro, de Educación Infantil, Primaria, Secundaria, Formación Profesional, Escuela Oficial de Idiomas, Música y Artes Escénicas, Artes Plásticas y Diseño, para oposiciones, Concurso General de Traslados, bolsas de trabajo*, listas de interinos*, etc (consultar convocatorias*)
El curso será impartido en modalidad a distancia mediante la plataforma on-line (http://campuseducacion.csif.es). El curso estará tutorizado, con seguimiento del avance de los alumnos y ayudarán a los mismos con las dificultades que se vayan encontrando.
Este curso se puede realizar en las siguientes convocatorias:
• 30 días son válidos para Oposiciones.
• 45 días son válidos para Oposiciones. Especial Sexenios Aragón y Castilla y León.
.doc
Conexión a Internet para acceso a la plataforma de teleformación.
Estar en posesión del título de diplomados, licenciado o grado, o en proceso de obtención de los mismos.